Mica Paris: Acabar con la maldición

Hay quien afirma la existencia de una especie de maldición que impide a los artistas soul británicos ser longevos en términos de éxito comercial continuado en el tiempo. Michelle Wallen (Mica Paris) -considerada como la reina del soul británico- acaba de publicar Born Again, quizás dispuesta a acabar con esa leyenda urbana.

Atrás, muy atrás quedan aquellos tiempos de éxitos, de vinos y rosas. Cuando su primer álbum So Good (1988) fue un éxito internacional, cuando su sonido soul/pop causaba sensación y admiración, cuando era amiga de Natalie Cole o Luther Vandross, cuando Chaka Khan fue la madrina de su hija, cuando Prince la escribía canciones y la invitaba a cantar con él en el escenario... Sin embargo, el éxito no duró demasiado tiempo. Quizá se mostró algo dispersa desde el punto de vista artístico, compaginando su carrera de cantante con trabajos como presentadora de radio, tv o actriz. Si a ello le sumamos que durante siete años se volcó en su vida familiar, todo ello explicaría que en todo este tiempo, sólo haya editado seis discos y su carrera se encontrara en caída libre, por no decir que había desaparecido. ¿La maldición volvía a cumplirse?.

El famoso productor Brian Rawlings ha ideado como fórmula para esa vuelta tan esperada no arriesgar en absoluto. Con el single "Baby Come Back Again" (escrito por James Morrison), con versiones de temas de Eric Benet, Keyshia Cole, Rihanna, Gershwin o de la propia Mica, apoyada en una moderna producción y emotivas letras se trataba de dar todo el protagonismo a esa estupenda voz que siempre me ha parecido que estaba teñida de la Motown y del estilo vocal de Aretha Franklin. En los 12 temas que incluye el disco nos podemos encontrar con baladas como "Born Again", "You're the Only One" o "I Remember" -con ese toque Rnb- o "Nothing But The Truth" -con sabor pop-country-. Hay espacio también para temas de corte más espiritual como "Stay" y "Hold On" que le tranportan a sus raíces musicales en la música gospel. También hay cabida para la música up-tempo, como queriendo recordar su pasado esplendor en las pistas de baile con cortes como "The Hardest Thing" o "Breathless". En mi opinión no es suficiente para una artista que fue considerada en su día el mayor talento de la música soul británica. Después de una década de ausencia, cuatro versiones y sólo ocho nuevos temas originales. Música para adultos, sin personalidad ni patrón, con una dudosa producción... Con más de 20 años de carrera musical, esta cantante inglesa ha eludido el estrellato a pesar de poseer una maravillosa voz. Ojalá aquella maldición no se repita, pero me temo que su nuevo trabajo no va a suponer el deseado renacimiento de Mica.

Clásicos del soul: Sam Cooke

A principios de la década de los sesenta no resultaba nada fácil la vida para un norteamericano negro. Si no te "integrabas" lo suficiente en la sociedad la consecuencia más probable era la marginación económica y social. Al mismo tiempo, la peor acusación que podías escuchar de tus propios hermanos de raza es que tu integración en el sistema había ido "demasiado lejos". Difícil tesitura...

El artista de Chicago (aunque nacido en Mississippi) supo compatibilizar el ser fiel a sus raíces con la necesidad de llegar al mayor número posible de personas. En efecto, si escuchas el álbum Live at the Harlem Square (1963), nos encontramos con un Sam Cooke interactuando con sus hermanos negros realizando un disco intenso y políticamente incorrecto, antecedente de futuro southern soul. Sin embargo si escuchas Sam Cooke at the Copa (1964), te sorprendes al escuchar el sonido de una gran superestrella de la música pop, con letras familiares y ritmos suaves del gusto de la gran audiencia... Sam Cooke en su versión interactuando con el público blanco. Después de seis años reinando en la comunidad negra con la música gospel (como líder del exitoso grupo Soul Stirrers), Sam se consagró para la gran audiencia con el tema "You Send Me" (1957). Creó un nuevo sonido a través de una innovadora combinación de gospel, pop y rnb que le llevó al número uno en las listas pop y rnb durante 26 semanas, millones de ventas y le valió el título "The Man Who Invented Soul".

A partir de ese momento desarrolló una asombrosa carrera plagada de éxitos: durante los ocho años siguientes hasta su muerte compuso y/o interpretó nada más ni nada menos que 34 temas que alcanzaron las listas de ventas, incluidas maravillosas canciones hoy clásicas como "I'll Come Running Back", "Chain Gang", "Only Sixteen", "Cupid", "Wonderful World", "Having a Party" o la impresionante "A Change Is Gonna Come", quizás su tema más importante, la primera canción protesta que le permitía cerrar la brecha existente entre el pop y el gospel. Fue un artista pionero en muchos sentidos. Considerado como el cantante de soul definitivo por su mezcla mezcla de sensualidad, espiritualidad, sofisticación y por su voz versátil que nunca encasilló en un ningún estilo. En su faceta como productor ayudó a otros artistas a realizar con éxito la transición del gospel al pop: Bobby Womack, Johnnie Taylor, Billy Preston o Lou Rawls. Además de ser un consumado cantante, compositor y productor, Sam Cooke es recordado también por ser el primer artista en adoptar una posición política negándose a cantar a un público segregado, siendo un comprometido militante en favor de los derechos civiles.

Así mismo fue uno de los primeros artistas, negro o blanco, en demandar el control de su propia carrera profesional, firmando un contrato sin precedentes con RCA que le permitía gestionar los derechos de autor que su música generaba, hasta ese momento en poder de los sellos discográficos. Además fué el primer artista negro en fundar su propio sello discográfico (Sar/Derby), su propia empresa de management, su propia empresa editora (Kags Music) ... y todos estos logros para la música los consiguió antes de cumplir los 34 años. La desaparición precoz de un personaje es toda una garantía de alcanzar la inmortalidad porque lo convierte casi manera automática en una leyenda, en un personaje de culto. Aunque es cierto que Sam Cooke murió con sólo 33 años y en circunstancias extrañas (aún sin esclarecer) lo cierto es que acumula suficientes méritos como para considerarle una leyenda de la música... el artista más importante de la música soul, nada más ni nada menos que el hombre que la inventó. Sam Cooke fue una verdadera superestrella en su vida. Después de su trágica muerte, su leyenda se hizo aún más grande. Su influencia se puede escuchar en el fraseo preciso de Smokey Robinson, en el valor de la conciencia a la hora de escribir canciones en Marvin Gaye, en la emoción cruda de Lou Rawls o en el control de la pasión de Aretha Franklin.

Will Downing: El último crooner romántico

Will Downing puede considerarse como toda una institución de la música soul más suave y sensual: "The Prince of Sophisticated Soul". Desde que en 1988 publicara su álbum de debut, ha sido capaz de permanecer impasible a los cambios profundos que han transformado en esencia la naturaleza del mercado de la música negra, más concretamente me refiero a la dictadura de la cultura rap y del sonido hip hop.

Nada es fruto de la casualidad, la longevidad de su carrera artística es testimonio de la pasión y coherencia que muestra por su profesión, aunque no debemos olvidar que la consistencia de sus ventas ha sido lo que, en definitiva, le ha permitido asistir interpérrito a los cambios de modas y tendencias. Will es el cantante ideal para el género rnb urbano clásico gracias a su magnífico tono barítono de voz y a su capacidad para conectar emocionalmente de manera inmediata con el oyente. Una vez superada su enfermedad (polimiositis), el artista de Brooklyn acaba de editar Classique, su segundo trabajo con el sello Peak Records y producido en colaboración con su viejo amigo Rex Rideout (uno de mis productores favoritos). Un total de 10 temas, que combinan temas nuevos compuestos por el propio artista (junto a Rex) con tres versiones de temas clásicos, pero siempre manteniendo la esencia del más puro estilo Will Downing: es decir, baladas rnb soulful con inclinaciones hacia el jazz contemporáneo.

Después de catorce álbumes, Will tiene un completo dominio de su profesión, un conocimiento de quién es como artista y el lugar que ocupa en este negocio. Sin aparente esfuerzo, el último crooner romántico del soul (con el permiso de Phil Perry) nos regala esas suaves armonías sazonadas con toques de la Motown y del sonido Philly International. Su sabor retro natural no forzado, es un sonido ya clásico, familiar pero que al mismo tiempo suena nuevo, reinventado gracias a la aplicación de las modernas técnicas. El único pero es que en Classique apenas hay variación de texturas y tonos (como en su anterior disco) y para alguien, que como yo, disfruta más con otros estilos puede resultar empalagoso o redundante tanta dulzura. La fórmula apenas ha variado, no obstante hay que reconocer que funciona (especialmente entre la audiencia femenina) y que si te gusta el rnb suave soulful de la vieja escuela, éste es un disco imprescindible para tu discoteca particular, un disco elegante que suena impecable y uno de los mejores editados este año.

Bobby Jones: En tiempos de tribulación no hacer mudanza

De un tiempo a esta parte me está resultando cada vez más complicado encontrar el lanzamiento de un nuevo trabajo que considere merezca la pena ser reseñado en este blog. Me pregunto si la razón es que mis gustos se han vuelto cada vez más exigentes o tal vez que el mercado discográfico transita por una etapa huérfana de creatividad y calidad. Quién sabe, quizá sea una combinación de ambos factores.

Afortunadamente Bobby Jones ha venido a rescatarme de este tedio y para ello se ha servido de un arma infalible: la vuelta a las raíces de nuestra música preferida... el blues más clásico. En esta ocasión -y sin que sirva de precedente- me dejaré guiar por el famoso consejo de San Ignacio de Loyola: "En tiempos de tribulación, no hacer mudanza". De la mano del sello Delta Groove Productions el veterano bluesman nos presenta Comin' Back Hard, lo que supone el retorno a la escena musical de uno de los grandes, conocido también como Bobby Jonz en su etapa de cantante de southern-soul. El azar - y todo hay que decirlo el legendario guitarrista de blues Jody Williams- permitió reunir a Bobby con The Mannish Boys. Primero Bobby colaboró prestando su voz al veterano grupo de blues tradicional en su aclamado álbum Lowdown Feelin'. Ellos le han devuelto el favor apoyándole en este proyecto de vuelta al viejo blues de los años cincuenta, "al de siempre" pero totalmente vital y no excesivamente nostálgico.

También es un disco a la vieja usanza en el apartado técnico: todos los temas han sido grabados y mezclados con medios exclusivamente analógicos renunciando a cualquier manipulación de tipo digital. El trabajo gana de esta manera en autenticidad y sentimiento, con un sonido fantástico, fresco y honesto tan poco habitual en nuestros días. Aunque evidentemente el protagonista del disco es la excelente voz bluesy de Bobby, un gran artista con una habilidad especial para interpretar el mensaje de las canciones (como lo demuestra especialmente en tracks como "Three Handed Woman" o "I Don't Know"), es en realidad un trabajo muy completo, en el que también brillan las labores de composición, producción y, por supuesto, el apartado instrumental responsabilidad de The Mannish Boys con quienes ha conformado un team excelente. Delta Groove Music ha sido capaz de recuperar para el mundo de la música a un cantante que puede aproximarse al sonido de BB King, Howlin 'Wolf y Bobby "Blue" Bland evocando estupendamente el sentimiento, la atmósfera y el espíritu de un club de Chicago en los primeros años de la década de los sesenta. Lo más soprendente de todo es que a sus años éste es el primer disco de blues que graba el artista de Louisiana...¡¡Podéis creerlo!!

Ruben Studdard: Doctores tiene la iglesia

Fue Gladys Knight quien, como jurado invitado de la segunda edición de American Idol, bautizó a Ruben Studdard con el apodo "Velvet Teddy Bear". En efecto, se asemejaba a un oso de peluche por su oronda figura y su delicada voz... acabaría ganando el concurso finalmente.

Han transcurrido ya seis años de todo aquello y Hickory Records (es decir, Sony) ha editado recientemente Love IS, el cuarto álbum ya de una trayectoria artística que se ha caracterizado por la ausencia de un criterio firme y reconocible. Ruben es un cantante de calidad, el supuesto heredero del gran Luther Vandross, pero su carrera no ha conseguido despuntar hasta el momento, obstaculizada por elecciones inadecuadas además de una supuesta falta de personalidad y carisma del artista. Cada nuevo trabajo se ha diseñado como respuesta al fracaso -cada vez mayor- del álbum anterior, si exceptuamos su álbum de debut. Así es, se ha movido siempre en clave rnb pero con inclinaciones hacia el pop de su primer álbum (casi dos millones de copias), oscilando hacia el gospel en su segundo disco (no superó el medio millón) o hacia el sonido más urban/¿Sexy? de su olvidable tercera entrega (no alcanzó las 250.000 copias)

En su último trabajo, una vez más, no alcanza todo su potencial. En esta ocasión se ha recurrido a la labor de producción del exitoso tandem compuesto por Jimmy Jam y Terry Lewis dispuestos a resolver el enigma que supone definir el estilo más adecuado para el artista. Han optado por una colección de baladas a medio camino entre el quiet storm y la música adulta pop; por lo tanto, más alejado de los estándares del rnb actual (excepto en el track "Don't Make Em"). Los temas originales son en general de suficiente calidad permitiendo un mayor lucimiento del artista, las versiones han sido innecesarias y fallidas. Su carrera no ha estado a la altura de las expectativas creadas en torno a él cuando ganó la edición de American Idol del año 2003. Posee un estilo demasiado anticuado para el rnb contemporáneo y, al mismo tiempo, carece de la sensualidad necesaria para ser un buen baladista del soul (slow jam), después de todo un osito de peluche es tierno, pero no suele resultar sexy. Difícil tesitura, tiene un claro problema de encaje y tras seis años de carrera artística aún se encuentra nadando entre dos aguas buscando su orilla en el mercado de la música negra. Resulta complicado saber hacia donde ir, esperemos que doctores tenga la iglesia (léase manager, productores o casas discográficas) y encuentren pronto la dirección adecuada antes de que su tiempo se agote para siempre.

Expansion Records: Reducto europeo del soul

Como os prometí ya hace un tiempo hoy os traigo un post muy especial. En esta ocasión no me voy a ocupar de comentaros el último lanzamiento de alguno de nuestros artistas preferidos, tampoco recordaré la figura de un artista o disco especial en el apartado de clásicos del soul. Simplemente quiero daros a conocer la magnífica e impagable labor desarrollada por el label británico Expansion Records para mantener viva esa llama del soul a contracorriente de los vientos dominantes que insuflan el hip hop y la cultura rap en general.

En un mercado donde el negocio de las ventas se concentran en la música pop, rock y hip hop, resulta meritorio que algunas personas tomen decisiones basadas en lo que dicta su corazón y no en la pura razón mercantil. Detrás de Expansion Records se encuentran sus fundadores Richard Searling (foto izquierda) y John Anderson que decidieron crear en 1984 un label especializado en la edición de vinilos de 12" de música soul. Sin embargo, una tercera persona, el editor de la revista Street Scene y gran amigo de Richard, Ralph Tee (abajo foto del reproductor), resultará providencial en esta historia. Cuando a finales de la década de los ochenta el sello entra en serias dificultades -problemas de distribución- Ralph aprovechando una entrevista que hace al conocido músico Gary Taylor consigue convencerle para que edite su próximo álbum en el sello de su amigo Richard. Será todo un éxito y el salto de calidad que necesitaba para alcanzar la notoriedad de la que goza actualmente.

A partir de ese momento Richard y Ralph se hacen definitivamente con las riendas del proyecto fundamentado en su pasión compartida por la música soul clásica. Su planteamiento es sencillo: servir como plataforma que ofrecen tanto a nuevos artistas como aquellos ya veteranos, la mayoría de ellos norteamericanos abandonados en su país por las grandes discográficas y que encuentran refugio en este label. No toda la música que se edita es de nueva creación, también gustan realizar maravillosas recopilaciones (muy recomendables), reediciones de temas antiguos, música sin editar, rarezas etc. pero siempre en clave soulful donde la calidad, sensualidad, elegancia y buen gusto no son negociables sino garantía y marca de la casa.

"Welcome to Expansion Records. If you like real soul music, you've come to the right place" así nos reciben en su página web y doy fe de que no es un slogan publicitario sino toda una declaración de principios. Ha sido votado durante cinco años consecutivos como mejor sello de soul británico por los lectores de la revista Blues & Soul. Pero basta de tanta charla, dejemos hablar a la música. Os he seleccionado unos pocos artistas, tan sólo una muestra de todo lo que podéis encontrar en su estupendo catálogo, lleno hasta rebosar de verdaderas joyas tanto del modern soul, del philly sound, del smoothjazz o incluso de la música groove dance. Algunas como Trina Broussard, Leon Ware, Maysa, Ebony Alleyne o más recientemente James Day ya han hecho presencia en este blog... hay muchas más que están ahí esperando ser descubiertas por todos vosotros.

Urban Mystic: El abrazo fatal del oso

Brandon Williams (Urban Mystic) contaba solo 19 añitos cuando se convirtió en toda una estrella emergente gracias a su disco de debut Ghetto Revelations (2004). Respaldado por Kaygee -productor y miembro de Naughty By Nature- el artista de Florida consiguió algo muy difícil: encontrar su propio lugar al sol en el saturado mercado del rnb.

En efecto, aunque su propuesta musical estaba próxima a otros jóvenes artistas del rnb urbano como Usher o Jaheim era único porque, de manera inusitada, combinaba una aproximación más espiritual del rnb (sus raíces gospel tienen buena culpa de ello) con unas letras más próximas a los estándares del rap. Ayudado por una voz intensa y carismática que le permitía una conexión rápida y sincera con el oyente y con un timbre asombrosamente parecido al de K-Ci Haley nos entregó un prometedor disco de debut al que llovieron las buenas críticas, premios y ventas. Ahora, de nuevo bajo el sello SoBe Entertainment, nos presenta su tercer trabajo GRIII: Old School 2 Nu Skool en el que ha participado más activamente tanto en labores de composición como en la producción. En el disco colabora la nueva joven vocalista Phyllisia, raperos como Yung Joc o P. Chace y ha contado en esta ocasión con estrellas caribeñas como Cecile, Shaggy y Beenie Man.

Fiel a su título, es una propuesta que rompe con ese enfoque más próximo al soul clásico de sus dos anteriores trabajos para incorporar al rnb elementos del hip-hop y del reggae quizá queriendo mostrar una faceta más diversa, joven y cercana a su generación. Si ya el álbum anterior supuso cierto paso atrás considerando su prometedor debut, su último trabajo es la mitad de buen álbum que el anterior. Sólo nos salvan su magnífica voz y cuatro o cinco temas del aburrimiento y la decepción más absoluta. El resto es prácticamente indistinguible de cualquier disco de rnb urbano actual que suenan en las emisoras de radio "gracias" al abrazo fatal de ese oso llamado hip hop. No debemos desesperar porque estoy convencido de que el tiempo corre a nuestro favor. El recurso de su estupenda voz sólo puede aumentar y madurar con la edad. Reconoce que sus influencias musicales han sido Jodeci, Gerald Levert, Al Green, Bobby Womack... esos discos que mezclaban soul, gospel y R&B. En los últimos cinco años ha dado muestras de su talento combinando con maestría impropia de su edad baladas románticas y temas rnb más urbanos. Todavía hay razones para la esperanza...

 
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